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jueves, 8 de julio de 2010

LOS MAYAS PENINSULARES - ETNOMUSICA [MEXICO]



Hace un algunos años un amigo me solicito que le ayudara a pasar un disco de vinil de gran valor musical por contener grabaciones en vivo hechas en encuentros musicales del sureste de México, este disco fue editado en el año 1980 por FONAPAS-INI (Fondo Nacional Para Actividades Sociales - Instituto Nacional Indigenista) con grabaciones del Archivo Etnografico Audiovisual del Instituto Nacional Indigenista.

Desde los instrumentos Prehispanicos hasta las Jaranas de las Vaquerias, interpretados en lengua Maya, nos muestra que la cultura Maya no se ha perdido y sigue vigente en el alma de los pueblos de esa región.

Los pueblos Mayas que aún habitan los estados de Campeche, Yucatan, Chiapas y Quintana Roo conservan muchas de sus tradiciones y su cultura ancestral, y estas grabaciones son muestra palpable de ello.

ENCUENTROS DE MUSICA TRADICIONAL INDIGENA
LOS MAYAS PENINSULARES
TEXTO ANEXO A LA EDICION
, p. de grabado de post-portada
Laic cu tippil kin
T yokol kaas t laxin
Cu hoppol hul ppum
Kay leil.

Así como se asoma el sol sobre el bosque del oriente, comienza del arquero flechador el canto.

(canción de la danza del arquero flechador),
Versión castellana de Demetrio Sodi, La literatura de los mayas, México, 1970, p. 35.

La presente grabación nació con la idea de difundir la música maya, dando a conocer una visión panorámica de los diversos géneros que se practican en la Península de Yucatán. Base de la misma fueron los encuentros de música tradicional indígena, llevados a cabo en: Calkiní, Campeche, el 1o. de diciembre de 1978; Valladolid, Yucatán, el 24 de junio del mismo año y en X-Hazil Sur, Quintana Roo, el 15 de marzo del presente año de 1980.

BREVE BOSQUEJO DE LA HISTORIA Y DE LA MUSICA MAYAS:
El origen de los MAYAS, término con que se designa a este pueblo por los estudiosos, está escondido en las profundidades de un misterio que nos parece irreductible. El mismo nombre maya procede de una terminología un tanto cuanto difusa: sin embargo, podemos acercarlo a otro término: MAYAB, que procede, en sus raíces etimológicas, den significado mágico, que quiere decirnos “la tierra de los no-muchos”, como enfatizando un carácter de grupo predilecto de las fuerzas divinas. El singular desarrollo de esta cultura llegó a su máximo esplendor entre los años 300 a 900 de nuestra era, época correspondiente al período clásico, en el que se construyeron suntuosos palacios, grandes centros ceremoniales poblados de pirámides, altares, estelas y cerámica de originalidad y belleza sorprendentes. Sus avances en la observación astronómica les permitieron realizar un calendario de gran perfección, basado en el movimiento de los cuerpos celestes, interpretados en un calendario agrícola ritual paralelo. Estos conocimientos eran manejados por un grupo sacerdotal-guerrero, que detentaba el poder, asegurado en la productividad de los trabajadores del campo. La música, expresión de la creatividad a todos niveles, alcanzó su apogeo en los complejos rituales religiosos mayas del período clásico, donde el uso de instrumentistas, cantores y danzantes llegó a un alto nivel en cuanto a va¬riedad y riqueza, para mayor fuerza de estos ritos espectaculares.
A través de las fuentes arqueológicas y de los códices indígenas, rescatados por cronistas e Investigadores españoles en la época de la Colonia, tales como el Popol-Vuh y los Libros del ChiIam-Balam, conocemos algunos detalles de su práctica musical. La música maya, entendida en su contexto social, se llevaba a cabo en la conjunción de la vida ceremonial, en rituales que evocaban los ciclos agrícolas o la aparición de los astros en el firmamento, en complejos festejos de iniciación en el ciclo de vida, del hombre maya, etc.; — ejemplo de ello es el nacimiento del nuevo ser; se le llevaba —en algunos lugares se hallan vestigios de esta costumbre— frente a un sacerdote, quien basado en mapas astrológicos y libros de! saber, predecía el futuro del región nacido; esta ceremonia se acompañaba de danzas, cantos y escenificaciones.

Landa describe dos plataformas rectangulares con una escalinata a cada lado, una frente al Castillo o Templo de Kukulkan, y otra cerca del Tzompantli, en Chichen-Itza. Dice que en ella. Se representaban sus historias y relaciones, es decir, escenificaban los mitos y las vidas de los héroes, tal como nos consta por la única obra de teatro indígena que ha llegado hasta nosotros, prácticamente intacta: el Rabinal Achí. Sabemos que esas representaciones, al igual que ahora en muchas de las ‘danzas” indígenas, eran una especie de danza dialogada o de teatro bailado, en las que las máscaras, la danza y muchas veces la parafernalia de los dioses se utilizaban durante el acto. Pero compañera de todo el espectáculo era la imprescindible música, ejecutada con una inmensa variedad de instrumentos, muchos de ellos ahora desaparecidos.

El apogeo cultural y artístico se ve eclipsado por un colapso tan desconocido como repentino, que se manifestó en el abandono de las ciudades, el decaimiento drástico de la población y el deterioro paulatino de los grandes centros ceremoniales.

La música, indispensable en los rituales antiguos se mantiene hoy día como compañera inseparable del ceremonial agrícola, prueba sólida de una herencia que resistió la acometida de la conquista y de lo. Subsiguientes acontecimientos de la historia maya.

Posterior al desastre ocurrido en la zona del Petén, al sur de la Península de Yucatán, los sobrevivientes huyen hacia el norte de la península, que al entrar en contacto Con la cultura tolteca, hacen abrir el telón de un nuevo periodo: el post-clásico, del que tenemos referencias más seguras y vivénciales. pues este período, que se inicia hacia el 900. concluye con la conquista española.

El Códice Dresden ofrece un magnífico ejemplo gráfico de Instrumentos musicales mayas. El cuadro, en general, representa la escena de un sacrificio. La victima. en este caso. es la Diosa del Maíz. A su alrededor, dos divinidades repetidas, forman un cuarteto musical: del lado superior izquierdo, un Dios Negro sostiene con la mano izquierda una sonaja de vara y con la derecha al parecer percute un caparazón que lo cubre. Del lado superior derecho, otra divinidad lleva en la mano una sonaja. Un tercer dios se encuentra del lado Inferior izquierdo y tañe un tambor cuyo sonido se representa gráficamente. A este tipo de tambores, en forma de U. se les introducía agua, para variar su afinación. Por último en el extremo Inferior derecho, un cuarto personaje toca una flauta con embocadura, figurándose también el sonido.

LOS MAYAS PENINSULARES - ETNOMUSICA
subido por Tioallan

1 comentarios:

  1. Hola, podrías decirme donde puedo encontrar esta grabación? tengo la posibilidad de comprar este disco pero antes me gustaría escucharlo. Gracias!

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